Esto era una chica que se llamaba Piñata. A Piñata le gustaba mucho ir en bici y un día encontró una cueva, fue como escuchar cantos de sirena pero ella entró. Al entrar sintió mucho pánico y se dio cuenta de que la oscuridad era su talón de Aquiles. Allí encontró una piedra muy extraña que era de color rosa, la cogió y se fue a su casa. Su madre vio la piedra y se la pidió a su hija pero ella no quiso dársela, al día siguiente se la pidió otra vez y ella le dijo de nuevo que no, era como la tela de Penélope. Un día, estando Piñata sola en su cuarto descubrió que la piedra tenía el don de salvar de todas las cosas malas, ya sea una enfermedad como perderte por el bosque, esa piedra era la panacea del universo, pero ocurrió algo por utilizar demasiado la piedra y Piñata se quedo en los brazos de Morfeo, pero la arpía de su madre al verla tendida en el suelo no hizo nada, la dejó ahí tirada y le robó la piedra rosa. Nunca se volvió a saber nada sobre la madre o sobre Piñata.
Firmado: Daniel Robles 3ºC
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